Capitulo 37.- Día en la playa con los amigos.

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- ¿Puedes cantarme algo? no puedo dormir.-Pidió.

Asentí con la cabeza rápidamente y busque en mi mente algo que cantarle.

- “Love me like you do, like you do, hold me tight and don't let go…What am I to do? When you love me like you do do do…” “pretty baby baby, I'm begging lady lady, take me to the top now and I'll take you higher, oh oh…”

Cantándole esos versos se quedó durmiendo poco a poco. Sus respiraciones ya eran mucho más tranquilas. También, poco a poco fui cerrando los ojos, oí abajo los murmuros de los chicos e intentaba descifrar lo que decían pero el sueño acabó apoderándose de mi…

Capitulo 37.- Día en la playa con los amigos.

* Ya han pasado 15 días*

-NARRA JUSTIN-

Desperté, como todos los días agarrado por Alicia. Sonreí al ver su cara risueña mientras dormía y con delicadeza me separé de ella. Bajé hasta abajo por las escaleras intentando armar no mucho escándalo ya que eran como las nueve de la mañana y todo el mundo estaba durmiendo. Entré a la cocina y bebí un baso de agua. Estaba seco completamente. Luego me metí en el baño para darme una ducha de agua fría, así me despertaría un poco. Quité todas mis ropas y luego entré dejando que el agua recorriese cada parte de mi ser. Entonces empecé a pensar en… ELLA. Desde que sucedió aquello tan horrible, había cambiado muchísimo. Odiaba estar sola, cada vez que se quedaba aunque fuese un minuto sin la compañía de nadie empezaba a llorar o a hacer cosas raras, por eso es que ahora dormimos juntos. También, llevo sin besarla desde el día aquel y eso es lo que no soporto aunque tampoco voy a forzarla, simplemente me aguantaría y  esperaría a que esto se le pasase pronto.

Estuve un rato mas debatiéndome con mis pensamientos hasta que ya decidí que era la hora de salir. Cogí una toalla y la envolví alrededor de mi cintura, dejando mi torso al descubierto. Pase por el pasillo hasta entrar a mi habitación. Ya dentro, me despojé de mi toalla y cogí los bóxers color morado para ponérmelos.

- Buenos d… ¡JUSTIN!-Gritó una voz detrás mía.

Me volteé y la vi a ella tapando su cara con las manos para no verme. Carcajeé y me puse de una vez mi ropa interior.

- Shawty, ya te he dicho que no me importa que me veas desnudo.-Le recordé entre risas.- Vamos, déjame ver tu hermosa carita.

- ¿Te has tapado esa cosa ya?- Abrió sus dedos, dejando un hueco en sus ojos para mirar.

-  Si, tranquila que no se ve nada.

Sonrió  y por fin apartó sus manos. Me coloqué unos pantalones de media pierna vaqueros y una camiseta blanca normal y corriente. Alicia me miraba sin decir nada, recorriendo con sus ojos cada movimiento que hacía. Quería acercarme a ella y besar sus dulces labios, me resistí.

- ¿Qué haremos hoy?-Preguntó curiosa.

- Ni idea, podemos ir a la playa si quieres.-Le propuse.-Con los chicos.

- No sé.-Dudó.- También podemos…

Me acerqué a donde estaba, sentándome en el lado de la cama. Acaricié su mejilla, poniendo un mechón de pelo detrás de la oreja.

- Princesa, no puedes estar todo el día encerrada en casa.- Hice una pausa.-Además que yo también necesito salir a la calle.

Y es que tampoco desde el jodido día ese, no quería salir afuera por miedo. Simplemente pisaba la acera para cruzarse desde mi casa a la suya y viceversa. Y ella sabe perfectamente que ya habíamos puesto la denuncia y la policía le estaba buscando sin cesar, que ya nunca se lo iba a volver a encontrar. Al final pareció entender y cedió por ir a la playa.

- Iré a casa a por ropa y bueno… pues eso.

Se levantó de la cama rápidamente pero antes de que cruzase la puerta agarré su muñeca y la atraje hacia mí, pegándola a la pared. Nuestros corazones latían rápido y las respiraciones se mezclaban. Estábamos muy juntos.

- Si quieres puedes desayunar aquí.-Le propuse acercando mi boca a la suya.

- No importa Justin así hablo con mi padre, que hace mucho que no tengo una conversación decente con él.-Sin duda, estaba intentando escabullirse.

- Bésame.-Le pedí.-Por favor, bésame ya no puedo aguantar más.

- Aún no, quiero esperar a que lo de M…-Le corté.

- ¿Por qué? yo no soy él, sabes que no te voy a dañar, simplemente es un beso ¿Qué hay de malo?- Puse mis manos en su cintura atrayéndola un poco más hacía mí.

- Nos vemos luego, despierta tú a los chicos y yo llamo a los demás.

Agachó la cabeza y entre un pequeño hueco se escabulló saliendo por la puerta. Me quedé inmóvil un rato y luego, furioso le pegué una patada a la mesa. Aunque no debí hacerlo porque me hice bastante daño en el dedo, claro, iba sin zapatillas. Me maldije a mi mismo y luego cogí unas supras negar para ponérmelas…

-NARRA ALICIA-

- Papa estoy aquí.-Le informé gritando.

Cerré la puerta y vi que había una nota pegada, la cogí para ver que ponía:

“Cariño, he recibido una llamada urgente de la agencia y tengo que marcharme ya mismo. Lo siento muchísimo, no te enfades con migo. Pattie además está encantada de que te quedes. De todos modos, como mucho en dos semanas estaré de vuelta. Te quiero”

Arrugue el papel y lo tiré al suelo. Corrí hasta la habitación de Débora y me tiré encima de ella provocando que gritase.

- La puta madre, que no puedo respirar.-Exclamó.

- Nos vamos a la playa.-Le informé canturreando.-Viene tu esposo.

-¿Chrtistian?-Abrió los ojos de par en par.- ¡Quita! ¡Quítate joder que tengo que vestirme!

Me separé de ella y salió corriendo hacia el baño. Negué con la cabeza mientras reía, esta chica estaba tremendamente loca… loca de amor por mi amigo.

Mientras estaba peinándose y vistiéndose, ordené su habitación ya que estaba un poco desordenada y luego subí a la mía para ponerme el bikini. Me puse uno de rayas azul turquesa y encima la ropa, cuando llegásemos allí ya me lo quitaría. Llamaron al timbre de abajo y me sobresalté, pero luego escuche una dulce voz que me llamaba, entonces supe que no había peligro. Desde lo de Marck, le había cogido bastante miedo a las cosas, no se por qué la verdad. Bajé con la toalla envuelta en mis brazos y abrí la puerta, allí me esperaba Justin con una sonrisa en el rostro, de esas que te enamoran en un segundo. También estaban Chaz y Ryan.

- ¿Bajas o qué?-Le dije a Débora gritando.

- Que ya voy pesada.

Después de 5 minutos más o menos, nos fuimos. Recogimos a Caitlin y Chris y luego fuimos hasta una playa donde no solía ir mucha gente y estaba algo apartada de lo público para así, evitar que nos fotografiasen. Bajamos del coche y todos menos Justin y yo salieron corriendo mientras se quitaban las ropas, directos al agua. Ayudé a mi novio a llevar las cosas a la arena y una vez que colocamos la sombrilla, las toallas y algunas cosas más, me quité la camiseta y el pantalón.

- Uh, ¿me vas a hacer un streaptease o qué?-Dijo Justin divertido.

No me había dado cuenta de que estaba delante de mí. Le fulminé con la mirada y le tiré el pantalón a la cara. Rió y luego él se quitó la camiseta dejándose sólo los pantalones. Nos metimos al final todos en el agua y empezamos a jugar como unos críos, simplemente nos divertíamos a más no poder. Ryan vió una medusa  y la cogió con la mano, al minuto esta estaba hinchada y roja. Tuvimos que acudir a que le curasen… pero por lo demás bien. Débora y Chris no paraban de tontear. Él la cogía en volandas dándole vueltas, ella reía sin parar y así… mientras, yo me divertía con todos. Estos días Justin y yo estábamos algo distantes, pero era por mi culpa no lo iba a negar. En ese momento uno brazos me rodearon por atrás y unos labios impactaron en mi mejilla, presionándola suavemente.

- Mi amor…-Susurró ÉL en mi oído.- ¿Me das un beso?

Sonreí y giré la cabeza para mirarle.-SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSNO.

- Oh ¡venga!-Alzó los brazos.- ¡Quieres matarme!

- Que tonto que eres.- Le di flojo en la mejilla.

Estuvimos un rato más en el agua y luego salimos para comer unos bocadillos. Me fijé en que la ardilla no le quitaba el ojo de encima a mi amiga. Con disimulación me acerqué a él.

- ¿Te gusta?-Le pregunté en seco. Pero bajito para que nadie nos oyese.

- ¿Ella?-Me miró- No, para nada.

Le miré encarnando una ceja. Rodó los ojos y rió.

-Vale si, es muy guapa y divertida.

- Lánzate tío.-Intervino Ryan, detrás de nosotros.

-¿Qué haces espiando?-Le grité yo, a lo que todos nos miraron.-Tira que no te quiero ver.

Se apartó de nuestro lado y se sentó justo al lado de Débora, a quien le pasó el brazo alrededor de los hombros y le dio un sonoro beso en la mejilla. Christian apretó la mandíbula enfurecido, a Ryan se le daba muy bien eso de joder…

- ¿Tienes algo que decir?-Le pregunté en voz alta a mi amigo para que interviniera de manera correcta antes de matar a su compañero.

- Ehmmm….-Pareció pensarlo.-Si, Déb., ¿puedes venir un momento?

Las mejillas de ellas se tornaron de un color rojizo y con bastante vergüenza asintió con la cabeza rápidamente y se levantó. Los dos se fueron hasta un lugar alejado. Yo me reuní con los demás, que estaban bromeando, en cuanto me acerqué al lado de Justin, sentí sus manos levantarme hasta hacerme sentar en su regazo. Puse mis piernas en el hueco que dejaban las suyas. A lo lejos vi a mis dos amigos hablando, sentados en una enorme roca.

- NARRA CHRISTIAN-

La llevé hasta unas piedras gigantes cerca de la orilla del mar, y ahí nos sentamos. Ella me miraba sonriendo esperando a que dijese algo pero yo estaba completamente perdido en sus ojos color miel, aunque cuando le daba en sol eran verdes.

- Bueno, ¿Qué querías?-Dijo ella sacándome de mi nube.

- Ah si emm…-Me rasqué la cabeza buscando una respuesta coherente.- ¿Qué opinas de Ryan?

- Si lo dices por lo de hace unos segundos yo no….-La corté.

- Vale, da igual.

Reí tontamente y miré el mar, luego la miré a ella con una sonrisa plasmada en el rostro. Me levanté y me miró extrañada. Yo solo me limité a encogerme de hombros y lazarla con migo al agua desde la roca. Todos se sobresaltaron del ruido que provocamos al caer desde esa altura. Salimos a la superficie y comenzamos a reír.

- Joder, ¡estoy mojada completamente!- Exclamó riendo. Le miré encarnando una ceja, había tomado esa frase con doble sentido.- ¡No seas guarro anda!

De repente, nos hundimos en un profundo silencio, mi corazón iba a mil ya que la tenía muy cerca. Dios, todo mi cuerpo me decía: “Venga, bésala ¿Qué haces?” pero no funcionaba, podría pensar que era un loco o algo, es decir, la conocía de… 20 días mas o menos y ya me gustaba. Sonaba algo loco aunque a Ali y a Justin les pasó eso.P use una de mis manos en su cintura y con la otra aparté el pelo de su cara, haciéndolo a un lado.

- Oye Débora, antes tenia que decirte algo pero…-No me dejo terminar.

- Bésame.-Fue como una orden.-Por favor.

Y ¡PUUUM! mi corazón estalló, creí que moriría. Curvó sus labios haciendo notar una sonrisita y me incliné para rozar nuestros labios, cuando los sentí, miles de mariposas revoloteaban en mi estómago. Capturé sus labios con más desesperación y ella puso sus manos en mi nuca, pegándonos más, nuestras bocas se movían acompasadas y nuestras lenguas se unían haciendo una batalla en la que no había ganador ni perdedor. Murmuró algo contra mis labios pero no entendí. Nos separamos por falta de oxigeno y junté nuestras frentes.

- ¿Qué era lo que tenías que decirme?-Me preguntó.

- Te quiero.-Le respondí divertido.

-NARRA ALICIA-

Aún seguía en el regazo de Justin, comiendo unas patatas que habían traído. Cuando giro la cabeza y me veo al par de tortolitos comiéndose la boca.

- ¡MIRAD!-Grité señalándoles con el dedo.

Todos exclamaron un “Awww” incluyéndome a mí y nos quedamos mirándoles un rato. Eran tiernos, muy tiernos y a Cait no le disgustaba nada que su hermano estuviese con mi amiga, es más, le encantaba. Justin me apretó más fuerte contra él, pero sin hacerme daño.

- ¡GUAPOS!-Les gritó Chaz desde donde estábamos haciendo que se separasen bruscamente.

Reímos y luego terminamos de comer. Guardamos todas las sobras y nos volvimos a meter en el agua, una tarde divertida entre mejores amigos.

                                                           (…....................)

Cuando empezó a anochecer, a eso más o menos de las diez y media, montamos en el coche de mi novio y nos dirigimos todos a casa, dejamos a los Beadles en la suya y luego nosotros fuimos hasta la nuestra. Como yo dormía con Justin y Débora iba a estar sola, se fue a casa de su por fin, novio, a dormir con él.

Entramos en casa y Chaz y Ryan fueron directamente a sus habitaciones, estaban agotados. Yo me puse el pijama en el aseo y salí también para dormirme, pero Justin estaba tumbado en la cama esperándome. Al verme se levantó.

- Tenemos que hablar.-Dijo serio.

En ese momento, el corazón se me encogió por completo y un nudo se me formó en la garganta. Su mirada no expresaba cariño, más bien tristeza. Joder, estaba asustándome, ¿querría cortar con migo? me cogió las manos, entrelazando nuestros dedos y luego me miró, penetrándome con su mirada.

- Alicia yo…

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Pues ahí lo dejo muahahahaha ¿Que creeis que pasará? ^ ^ 

No tengo tiempo para decir nada más porque mi madre está aqui acosandome, diciendome que estoy todo el día con el ordenador y bla bla bla...

En fin, espero que os guste el capi... ¡OS AMO!